Un pedazo de hoja

Hola chicos y chicas, espero que estén bien y que estos días los esten pasado súper.

Bueno en esta ocasión les quiero hablar acerca del inicio, el porqué de todo ese odio y sufrimiento que Elena tiene, este será solo un resumen o un fragmento de lo que paso en realidad.
Todo ocurrió antes del nacimiento de Elena, quiero decir mucho antes, cuando sus padres aun eran jóvenes y no se conocían. El momento en que todo comenzó fue una tarde de verano, cuando un par de hermanos caminaban por las hermosas calles de Paris. El hermano mayor tenía 18 años y al día siguiente cumpliría 19 por lo que iba cuestionando a su hermano menor acerca de que le regalaría, pero su hermano de tan solo 15 años iba demasiado distraído como para contestar
-¡James! - grito el muchacho al percatarse de que su hermano no lo iba escuchando
-Lo siento - dijo apenado el chico y miro a su hermano - es solo que...
-Es solo que...
-Aun me siento mal por lo de Nicole - murmuro con tristeza y su hermano lo rodeo con el brazo. Pues la triste historia era que James había sido engañado por su novia un par de días atrás y se sentía sumamente frustrado - aun no entiendo cómo pudo hacerme eso a mí
-Descuida no va ser la última vez, las mujeres son así, cuando les aburres te dejan... serás afortunado cuando encuentres una que no se aburra y te quiera de verdad
-No creo en santa Claus
-Tonto... iré por un helado espérame aquí
-Si Charles
El hermano mayor se fue tranquilamente caminando, tal vez muchos pensaran que era el destino, tal vez no, pero esa tarde, en ese momento, en la heladería Charles conoció a la mujer más hermosa que había visto. Ella parecía discutir con alguien así que él se acercó sin pensarlo
-¿Está todo bien? - pregunto y ambas chicas lo miraron
-Si... - contesto ella un poco tímida
-Claro que no, usted tiro mi helado y ahora va a pagarlo
-Usted choco conmigo, no fue mi culpa - amabas comenzaban a discutir nuevamente cuando Charles intervino
-Yo pagare el helado - miro dulcemente a la chica y sonrió - descuida
-Gracias
Después de pagar el helado, compro otro y se lo dio a la chica, quien apenadamente lo recibió. Ambos salieron de la tienda y se fueron caminando
-Gracias por lo de antes, te eh causado problemas...
-Al contrario, me dio gusto poder ayudarte - la chica comía lentamente el helado y el no sabía que más decirle - ¿vives por aquí?
-No - contesto casi inmediatamente - estoy de visita, vine a ver a mi abuela
-Ya veo, y ¿en dónde vives?
-Inglaterra
-Ah... eres extranjera
-Si
-No se te nota, hablas muy bien el francés
-Vengo muy seguido
-Eso es genial - dijo con demasiada alegría que se avergonzó - lo siento eso fue muy inapropiado - Charles se detuvo y bajo la cabeza pero ella no lo noto y siguió caminando - oye... - cuando le hablo la chica ya iba a la mitad de la calle y un carro se aproximaba a ella. Pronto Charles vio como un líquido rojo manchaba el piso y el vestido de la chica, James se había atravesado empujando a la chica, quien había caído sana y salva al otro lado de la calle
-¡James! - grito el chico mientras corría hacia su hermano - ¡contesta! - gritaba, pero su hermano se encontraba desmayado debido al impacto.

Después de un par de horas el medico al fin salió y dio la tan anhelada noticia, James estaba fuera de peligro y lo único que tenía era una fractura en el brazo. Charles se sentía aliviado al igual que sus padres y la chica.
Un par de días mas tarde la joven regreso al hospital, cuando no había nadie de la familia
-Puedo verlo? - pregunto la muchacha - quisiera disculparme con el
-Desde luego - contesto la enfermera - es un chico muy valiente, ser atropellado por defenderte, debe quererte mucho - comentaba la enfermera mientras caminaban hacia la habitación
-No... ni siquiera se su nombre - añadió tímidamente
-Amor a primera vista, que hermoso
-Sé que es extraño pero con todo lo que paso ese día ni siquiera tuve tiempo de ver su cara - al decir eso la enfermera se quedó sin palabras
-Aquí es - dijo abriendo la puerta, en la cama se encontraba el chico que la había salvado, estaba muy entretenido viendo la televisión pero en cuanto entro la chica la apago de inmediato
-Hola - saludo ella primero - lamento lo que paso y quería disculparme
-Hola, descuida no me paso nada grave, además no es algo de lo que me arrepienta, me alegra que estés bien - al escuchar aquello la chica se sonrojo - y ¿cómo te llamas?

-Charlotte… Charlotte Florit

-Que hermoso nombre – ambos jóvenes se miraron y ese fue el comienzo de un hermoso amor que pronto se convertiría en la manzana de la discordia

Bueno espero que les haya gustado, porque eso sera solo un poco de lo que pronto sera publicado en el Fic, asi que esperenlo y que tengan un lindo dia.